Un sentido de vida

Todo viaje que iniciemos tendrá más sentido si sabemos dónde vamos. Así también nos hace muy bien saber qué estamos haciendo con nuestra vida y hacia dónde vamos. Muchas personas me han comentado en alguna oportunidad que no saben hacia donde van, y que ésta, la vida, se enmarca dentro de 2 grandes dimensiones: la rutina del trabajo y su vida familiar de todos los días. ¿Es tan aburrida la vida para que sea una rutina?. No podemos creer que así sea. Lo que falta es orientar la brújula, dar una dirección al timón y acelerar. Algunas sugerencias que son recomendables a la hora de partir:

• Hay que proponerse metas y propósitos factible de realizar (qué queremos lograr y para qué)
• Hacernos sentir que podemos hacer algo: cuando se quiere se puede....
• Apoyarnos en nuestras fortalezas que todos tenemos y debemos descubrir: la perseverancia, la motivación, la elegría, el conocer o saber hacer algo, el emprender, nuestra personalidad, las ganas de hacer cosas, y tantas otras fortalezas que podemos descubrir y que muchas veces las tenemos pero no las hemos desarrollado, y a veces, ni siquiera las hemos descubierto.
• Establecer prioridades a nuestras tareas desde lo más a lo menos urgente con el fin de solucionar a medida que se debe las problemáticas, colaborando esta medida para no preocuparse, sino que ocuparse en solucionar los problemas. Otra medida para evitar el estress.
• Desarrollar positivamente aquello que nos diferencia de los demás y son positivas pues nos puede dar ventajas comparativas a la hora de competir al postular a algún trabajo, encontrar un amigo, presentar proyectos, agradar a otras personas, etc.
• Si caemos y fracasamos en algún proyecto debemos levantarnos, aprender la experiencia y crear otro proyecto. Pero nunca rendirse y no intentar nada más por haber fracasado una o más veces. Es aceptable el caer pero no es aceptable no levantarse y seguir.
• No tener miedo de innovar hacia nuevos proyectos de vida que puedan ser beneficiosos.
• Considerar a nuestra familia o amigos cercanos que crean en nuestros proyectos. No es muy recomendable sentirse solo. La compañía de los demás nos hace perseverar y sentir más confianza.
• Mantener una actitud positiva en todo momento. Esto nos hace mantener las ganas de hacer y lograr lo que queremos, además de servir para mantener la mente saludable y evitar el estress.
• Aprender de las experiencias fallidas y no repetir los mismos errores. Se dice que el hombre es el único ser que tropieza dos veces con la misma piedra...
• Nunca despreciar a nadie, ni siquiera a aquellos con los cuales debemos competir.
• Hacer de amigos o al menos conocidos. A veces ayudan mucho a lograr metas a través de recursos que nosostros no contamos pero que ellos sí cuentan.
• Todos los días hacer algo por lo que queremos lograr y no dejar todo para el final o a última hora, pues es muy posible que no lo alcancemos a realizar todo lo que requiere cuando se acaba el tiempo.

La verdad que hay muchos consejos más que son de provecho tener en cuenta pero para comenzar hay que... comenzar, y esta es la primera decisión importante... la decisión de comenzar a dar sentido a nuestras vidas y dejar de sentir la vida como una aburrida rutina, que es mucho más que eso... Es la vida, lo más preciado con que contamos. Vivámosla con nuestra mayor dedicación.

Mejor calidad de vida laboral

En los actuales tiempos de competitividad las empresas deben recurrir a estrategias de gestión que incentiven a sus trabajadores al logro, con el fin de desarrollar constantemente en ellos un mejoramiento de la calidad de su trabajo. Esto se logra mediante la aplicación de políticas como la creación y mantención del clima laboral favorable del trabajador, cumplir con las leyes laborales vigentes, insertar la familia dentro de actividades de su personal, conservar limpio el ambiente, mantener buenas relaciones con la ciudadanía, acercamiento a la capacitación para desarrollo del personal, el mejoramiento remuneracional a través de incentivos al mejoramiento de la productividad y otras estrategias con los mismos fines. Las empresas deben hacer un esfuerzo en el incentivo a sus trabajadores, en el mejoramiento de la productividad y el fomento para la creación y aplicación de nuevas formas de trabajo desarrollando la innovación y creatividad entre el personal, todo esto, con el fin de fidelizar la relación laboral. Pero lo anterior, para que tenga validez, debe ser adecuadamente compensado a los trabajadores a través de bonos de producción o de innovación, desarrollo profesional, mejoramiento de beneficios que incentiven al trabajador a lograr metas. Estas últimas deben estar al alcance del rendimiento del personal con que se cuenta para que no sean metas inalcanzables que fomentarán el desánimo y frustración y, por lo tanto, una peor calidad de vida de los trabajadores.

La responsabilidad social no debe ser considerada sólo la relación de la empresa con su entorno, sino también, y principalmente, con sus trabajadores. Es aplicable la reflexión de que "la caridad empieza por la casa", es decir, por el personal de la empresa. Esto nos lleva a visualizar que muchas empresas, de todos los países, aún de los países más desarrollados, deben orientar acciones efectivas en consecusión de un mejoramiento de vida de sus trabajadores.